ASÍ
Toda nuestra razón se resume
en nuestras creencias;
en la composición del
horizonte
perfecto
que nos
marcamos.
Así conformamos el
parcial anticipo de lo
que será nuestro abismo.
Así, cada día,
llenamos tenazmente
los márgenes de los
límites inciertos que
constituyen nuestra alma.
Y así, en esa intemperie,
siguen latiendo las ruinas
que marcan el ropaje
con que nos vestimos.
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